Las niñas que nacen en cuna de oro

Niñas pequeñas que nacen con la simpatía de papá y los rasgos de mamá, que reposan y se mecen dentro de una cuna de oro, pequeñas cuyas madres hacen actuación y laboran con los padres en telenovelas donde son ellos quienes realizan la producción. Niñas con suerte dicen muchos, no conocen y probablemente nunca conocerán la precariedad.

Niñas que crecen y deciden seguir los pasos de mamá, se aseguran los estudios pero no importa si declinan, tienen ya un lugar asegurado en el mismo imperio que fabricó la imagen de mamá. 

Niñas que ahora son mujeres de la alta sociedad, que se saben de sangre azul, aparecen en revistas de moda, compran sólo la mejor ropa de marca y hacen lo posible porque su nombre florezca en las pantallas.

Mujeres que comen con la realeza de Inglaterra y en su viaje lucen vestidos Dolce & Gabbana, pasean con bolsos costosos y cargan en ellos unos cuantos salarios de la prole mexicana.

Mujeres bellas y envidiadas, que viven tras pilares de mármol, alejadas de una realidad que no las alcanza, que para ellas no puede ser verdad. Mujeres que tocan con la punta de los dedos su ansiada felicidad, la que a veces sienten lejos cuando quieran o no, llevan a cuestas la elección de la nueva pareja de mamá. 

Mujeres de las que escribo porque comparto con ellas la nacionalidad pero no el código postal ¡una suerte a decir verdad! que en un país de jodidos no conocen y nunca conocerán la precariedad.

Turbación

¿Qué hace una mujer proletaria llenándose los senos y las manos con versos?
¿qué hace insistiendo y riñendo?
queriendo parir algo más que otro cuerpo
o ocupar el presente armando el futuro 
ese que nunca se sabe si de verdad vendrá

Qué gana contemplando y juntando imágenes de la muerte
si a ella al fin y al cabo más tarde que temprano
o más temprano que tarde irá
qué es lo que hace helándose, aislándose
repartiéndose entre cuatro paredes oscuras

Qué hace una mujer sin tiempo para tales menesteres 
exaltando sus miserias,
juntando sus incertidumbres todas como un trofeo
entrando voluntariamente en contradicciones
deseando todo en carne viva
qué hace acurrucándose a un poema de Pizarnik o a uno de Huerta
qué es lo que la hace tan terca e ingenua
llenándose de enfermedades estomacales y desvelando las noches 
qué es lo que quiere que no encuentra aquí
donde no hay nadie que le solape los textos 
ni las ganas de hacerlos

No esperes que te cubra lo mismo que te exhibe
aspira a más, aspira a más- le dicen-
cómprate un poco de poder sobre los demás
fíncate tú que puedes, que aún puedes
no te hundas, estás cavando tu propia tumba
tu tumba, tu turba, tu penumbra
tu deseo te degolla lentamente

Decadencia, decadencia puede ser la palabra, no lo sé
Qué haces mujer, qué haces